lunes, 6 de septiembre de 2010

mal dia

Primero y principal, aclaro para cualquier lector, que esta es una entrada larga, amargada y que quizás no entiendan, así que a no ser que quieran meterse un rato en mi cabeza (cosa que no aconsejo) y caminar a donde lleve, les sugiero que dejen de leer ahora y esperen a una nueva edicion de Guille's modern life.

Todo empieza con una pelotudez de magnitudes extraordinarias, como siempre. Algo tan irrelevante como no encontrar un peine me saca de control, me llena de rabia. Me preocuparía, si no fuese porque entiendo que mi casa es el puto triángulo de las Bermudas, y que la disciplina es una palabra extraña, y que el peine es el caso un millón de las cosas que desaparecen místicamente (es normal estar harto, creo).
De todas formas un peine es excusa suficiente para empezar mal el día, por lo menos para mi. Y la sigue la soberbia de un imbécil-insignificante, de esos que fueron subidos a un pedestal por su entorno, y valen mierda, pero qué puedo hacer más que comerme mis palabras?, cuántas veces intenté ya decir algo y mis palabras caen en oídos sordos?, pero casualmente hoy decidí vomitar bronca desde temprano y gritarle al imbécil ( y esto no es una película, así que mi valentía, OBVIAMENTE, no se vió recompensada con justicia, sino con la frustración de ver como otra vez, el victima-idiota, sale beneficiado con mi bronca, día: 2, Guillermo: 0). Otra vez soy responsable yo, de todo, de lo que realmente soy responsable (que deberían ser las cosas con las que lidiar día a día), y de lo que no también, y especialmente de lo que no (tengo que lidiar con todo, otra vez). Y me gustaría parar y hacer una breve reseña sobre las diferencias que se hacen, pero están justificadas, voy a enumerar:

Vos ya sos grande.
Siempre fuiste más responsable.
Siempre fuiste más autónomo.
Siempre fuiste más serio.
¿No te das cuenta que él no sabe?.
Él es más chico.
Él no se sabe manejar.
Y sino, la falta total de explicación, un grito, algún comentario soberbio y listo, total a quién carajo le importa lo que yo pueda pensar (yo, frío, soberbio, malo, egoísta, interesado yo).

De repente escuchar esa manera desagradable de masticar chicle con la boca abierta e intentar respirar, potencian el día de mierda y lo llevan a la distopía de los días de mierda, y me acuerdo que tengo el iPod con los auriculares en el bolsillo (nada mejor que escaparse con música, si eso pensé, y eso hice), aunque sabiendo que eso iba a implicar mil críticas sobre lo poco sociable y afectivo que soy (quizás soy anti social, porque NO TE AGUANTO, ni a vos ni a tu "sociedad", pero bueno, eso no se tiene en cuenta, hay que ser social y sonreir :) ). Y entonces espera a que esté empezando a tranquilizarme para preguntarme alguna pelotudez, y tengo que responderle, y TENGO QUE, porque se, no porque sea inteligente, ni especial, ni nada parecido, simplemente PORQUE SE, porque nací sabiendo, sin ningún tipo de esfuerzo, y solo por saber ya tengo el compromiso moral de hacer todo lo que "nací sabiendo", y aclaro esto de nacer sabiendo porque no implica ningún tipo de reconocimiento posterior, simplemente tengo que ayudar, hacer, responder para que toda esa manga de egoístas siga con lo suyo, y yo siga aprendiendo, cada vez con menos ganas.

Ya después de eso, hasta la cara de idiota de un pobre peatón me da ganas de bajarme y cagarlo a palazos, solo por tener cara de imbécil y caminar des-preocupadamente, es como el efecto avalancha en los diodos, es una reacción en cadena que se potencia exponencialmente, y llega un punto en el que el quiebre es TAN cercano, me molesta TODO, la correa de mi morral y como se tuerce incómodamente, las mangas mal dobladas de mi buzo debajo de la campera, mi pelo mal peinado por la falta de un peine, y un montón más de eventos circunstanciales que me gustaría citar y no tengo ganas. Bueno me permito solo la agresividad del pelotudo mayor, aunque no tenga sentido explicado así tan brevemente, pero sirve para mi katársis.

Finalmente, para completar mi frustración, no tengo mi cuaderno, así que no puedo anotar con detalle lo que siento, y ni bien me doy cuenta de eso, es que me empiezo a olvidar todo lo que fue pasando (después voy a recordarlo seguro, pero a mi cabeza le gusta cagarme la vida de maneras intrincadas, nos peleamos un rato, y terminamos riéndonos juntos, mi cabeza y yo).

Ahora releo, y me incomoda particularmente la posibilidad de faltas de ortografía y mi falta de ganas de corregirlas, y me pone nervioso haber olvidado algún hecho de esta serie de eventos desafortunados que viene siendo el día de hoy. Principalmente porque venía desahogándome con éxito, y me gustaría aprovechar más la entrada. Ya fué.

1 comentario:

  1. Ojala a medida que pasen las horas, el dia vaya mejorando para vos. Te mereces millones de cosas lindas y felices, no días malos como este que estas contando. Espero que por lo menos una cosa rompa esa serie de eventos desafortunados (porque a veces con una sola alcanza).
    Ya te lo dije y espero que te haya llegado, si queres contas conmigo para lo que quieras. Sos una persona super linda (y ahora me concentro en el tipo de persona que sos) y te mereces sonrisas y magia y sueños y cosas felices. Ojala que las encuentres hoy, aunque sea en cosas chiquititas.

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